viernes, 8 de julio de 2011




¿hay un poco de pacesita rota colgada de un hombro donde dejar este tajo trabajo acumulado en los golpes de cada jornada previa a la noche del supuesto descanso?


Las llaves del puerto fueron cegadas en la noche
se cerro la puerta de la risa en la penumbra
y todos nosotros nos seguimos preguntando como es que el cielo escupe lluvia.